En los 70s, se vivió una llamada “revolución sexual” que podría estar volviendo a darse de forma distinta, presente a través de una serie de debates sobre la diversidad, el género y la sexualidad: Más naciones legalizan el matrimonio homosexual o el aborto, aunados a las luchas feministas, y otras discusiones no tan sonadas como, por ejemplo, la despatologización de la transexualidad de parte de la OMS (http://www.who.int/es/temas-salud/cie-11). Tales discusiones han llegado a la industria del entretenimiento y es que, por ejemplo, Anita Sarkeesian, comunicadora canadiense, denuncia cómo funciona el sexismo en los videojuegos, en lo que incluye a la “damisela en apuros”(https://www.youtube.com/watch?v=X6p5AZp7r_Q), tomando como referencia, entre otras, a la princesa Peach de Súper Mario Bros., quien es secuestrada en múltiples ocasiones sin ser nunca un personaje jugable.

Y pues, recién sobre la saga de Mario, Nintendo anunció Super Mario Bros. U Deluxe, en el que aparece Toadette, una versión femenina de Toad, a quien se le ha dado una particularidad jugable vista en el video: Así como Mario adquiere poderes con objetos, Toadette se coloca una corona para transformarse temporalmente en una versión de la princesa Peach, llamada Peachette, lo que le permite también obtener habilidades. Tras el anuncio del juego, el artista ayyk92, publicó en Twitter la imagen anexa, en la que es Koopa quien utiliza la corona para transformarse en una versión de la princesa, idea que fue reciclada una y otra vez por otros usuarios de la red, quienes aportaron cada quien su visión de la nueva chica, y llamándola de diversas formas, entre ellas, Bowsette.

La diversidad de recreaciones del personaje incluye diseños simples, eróticos, unos más humanos, otros más “bestia” (caparazón, cola, garras, etc.), algunos más rudos o más dulces. Lo único constante son el estilo similar a Peach, el porte de la corona, y los cuernos de Bowser. Pero, ¿por qué saltamos de los debates de diversidad a un personaje ficticio? Pues porque, por si no lo notó usted, Bowsette es transexual.

En la animación japonesa existen los personajes llamados trap (del inglés, trampa), aquellos diseñados para parecer del sexo opuesto al que son. Recientemente, siendo docente universitario, un estudiante amante del anime me pedía opinión sobre el por qué “tantos” traps en las series actuales, lo que habla de lo muy visible del tema: La sencilla razón es el atraer un público que es cada vez más abiertamente diverso.

Parte de esa apertura tiene que ver con la sexualización de Bowsette, y es que muchas de sus imágenes procuran ser sugerentes o directamente referidas al sexo. Sus recreaciones eróticas son tales que incluso se ha convertido en una waifu (esposa/pareja), indicando que hay una atracción platónica, lo que también ha hecho que sea buscada por el público consumidor de pornografía (https://www.youporn.com/world/bowsette-searches/). El tema ha llegado al punto de solicitar a Nintendo que la incluya en algún futuro juego (https://www.change.org/p/nintendo-make-browsettecanon), es decir, que quieren que un personaje abiertamente sexualizado por la comunidad gamer sea utilizado en un videojuego apto para todo público.

 

Con todo esto, entonces, estamos hablando, primero, de una aún mayor aceptación de la diversidad sexual. Lo segundo es el poder de la gente, y es que ante las exigencias, Nintendo se vio obligado a publicar un artbook en el que se incluye que para el juego Super Mario Odissey, habían pensado en un personaje con un origen muy similar a Bowsette, y se cree que esta inclusión fue para acallar el clamor popular, además de hacer pensar que el personaje (o alguna variante) será utilizado en un futuro.

Tema aparte, este meme me permitió percatar una realidad: Publicando en redes sociales sobre Bowsette, un familiar adolescente me comenta que su novia “se viste como trap (chico) para él”, expresándolo con orgullo. El asunto me llevó a entender otro hecho, y es el cómo en un grupo de estudiantes, una chica hacía el papel de chico y comentaba jocosamente sobre su -imaginario- pene, haciéndose llamar trapo/trapito (otra forma de decir trap). Inicialmente, asumía que estas actitudes eran por otros motivos, pero la charla con aquel familiar me permitió entender que el ser un trap podría ser una característica atractiva hasta cierto punto, y me refiero es a que el representar ambos sexos puede tener una carga de humor para algunos jóvenes, lo que resulta atractivo. Por supuesto vale aclarar que Bowsette no ha iniciado este fenómeno, pero sí me ha permitido entenderlo.

La conclusión es que el mundo sigue cambiando: Los cánones de belleza cambian ante nuestros ojos, siendo que una persona con características andróginas pueda resultar atractiva en el mundo más diverso que se abre ante nuestros ojos, a la vez que un personaje abiertamente sexualizado es discutido como jugable para público incluso infantil. Veremos lo que depara el futuro, esperando que, en cualquier caso, sea más abierto, libre, tolerante y respetuoso, sea o no con Bowsette incluida en los videojuegos.

 

Hacer Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.